Nuestro Centro de Educación no formal Madre Dolcet, en Reja Grande, está cumpliendo 20 años desde que se organizara como tal.
La figura de Madre Concepción Dolcet, con sus rasgos de educadora atenta y solicita a ir hacia las periferias, organizadora eficiente, emprendedora constante con la visión de continuar con la obra que María Ana iniciara, inspiró su nombre y el deseo de acoger el legado de Educar el corazón.
Hoy la comunidad agradece por cada una de las personas que aportaron su granito de arena en el amasado comunitario: hermanas y laicos que con sus gestos, palabras y acciones se comprometen a seguir dándole vida.