Durante una semana, desde el 7 al 14 de julio, hemos tenido el privilegio de poder vivir y servir en el mismo lugar que vio nacer y crecer a nuestra Madre Fundadora; como parte del itinerario Pastoral que venimos recorriendo en la Provincia Ibérica acogimos la llamada de nuestro papa Francisco y nos pusimos en camino para ser “Familia en salida”.
Aprovechamos esta experiencia para empaparnos de las raíces que nos hacen ser Familia de María Ana, conocer nuestro Carisma más a fondo, sentirnos miembro y parte fundamental en esta familia y regalar todo eso que tenemos, poniéndolo al servicio de aquellos que hoy más lo necesitan. Servimos por grupos en el Hospital General de Granollers y en la Residencia Les Franqueses del Vallès donde intentamos llevar un poco de alegría, escucha y cercanía.
Peregrinamos a Montserrat para sentir un poco lo que viviría María Ana en aquellos tiempos, cuando con sus hermanas se pusieron en camino hasta la Moreneta. Fue muy significativo encontrarnos junto a la placa de María Ana donde por primera vez se hacía la experiencia de estar allí como Familia.
Oramos ante la imagen de Santa María del Mar, frente a la cual Mª Ana tantas veces oraría y pediría luz para ir haciendo su camino. Allí le presentamos a toda nuestra Familia Carismática, todas sus necesidades y a cada uno de los que pertenecemos a ella.
Fue una semana muy intensa que nos llevó a conectar con nosotros mismos, con nuestras raíces de familia, con nuestras llamadas personales y desde allí ofrecer gratuitamente nuestro pequeño servicio.
Solo nos queda agradecer a tantas personas que hicieron posible esta experiencia, especialmente a las hermanas de la Comunidad del Hostal y de la Comunidad de Barcelona, y al Equipo Directivo y profes del Colegio de Granollers y del Colegio de Barcelona.
Presentamos algunos testimonios:
“El lujo de compartir con una familia maravillosa de personas y acercarme más a Dios y a María Ana”. Celia- Granollers
“Un año después la Familia Carismática se volvió a encontrar, esta vez donde todo empezó, para dar un poco de nuestro tiempo en favor de los demás. Deseando de nuevo volver a encontrarnos para vivir nuevas experiencias”. Óscar – León
“A pesar de estar en otras tierras, de vivir con gente que apenas conocía, al pisar esa torre me he sentido como en casa. Cada uno de nosotros cargaba con sus sentimientos, sus valores y sus experiencias vividas pero todos con una meta: vivir los valores del evangelio y experimentar la fraternidad.
Y sentados en la mesa poco a poco entre magdalena y magdalena fuimos creciendo en familia. Y en cada día, con cada anciano y cada niño descubrimos nuestros tesoros y vivimos la entrega y el dar lo mejor de nosotros y a cambio recibimos sonrisas, cariño y vida.
Este año sin embargo todo se ha llenado de M Ana, al pisar su casa, al acércanos al pozo, al horno o el lledoner que disfrutaba de pequeña y sentir los sentimientos vividos por ella. Disfrutar el camino que hizo con las hermanas y experimentar el esfuerzo y el sacrificio. Y visitar los lugares que marcaron su fe.
Una gran experiencia que nos ayuda a hacer camino y en compañía como una gran Familia” Espe – Andalucía
“Experiencia, que motiva, impulsa, ánima, alegra; experiencia que me hace sentir familia María Ana Mogas; experiencia que abre puertas de escucha, confianza, empatía y me lleva a descubrir y palpar el rostro de Cristo en mi hermano. Gracias por ser parte de mi vida”.Scarlet-Madrid
-Peregrinamos a Montserrat,… encontrarnos junto a la placa de María Ana donde por primera vez se hacía la experiencia de estar allí como Familia.
*Perdonad pero no es la primera vez, ya se hizo dos peregrinaciones a Montserrat y a la placa de Mª Ana, como familia de Maria Ana .
– Oramos ante la imagen de Santa María del Mar,…
*Perdonad pero ya se hizo otras dos peregrinaciones a Sta. Maria del Mar…
Disculpad creo que era mi obligación puntualizar el tema. Un abrazo