Del 14 al 20 de enero se reúne en la Casa Madre el Consejo de Congregación, formado por el Gobierno General y las Delegadas de los distintos países. Quieren ir compartiendo con toda la familia carismática la reflexión y el hacer de estos días:
Festejamos de un modo especial el día 13 de enero, cumpleaños 196 de nuestra Madre Fundadora:
Convocadas a nacer de nuevo, celebramos la profesión de nuestras hermanas Daniela, Nadege, Cristina, Rosalina y Helena. En ellas, los signos de vida nueva, interculturalidad, alegría, juventud, deseos de entrega… la primavera abriéndose paso en la vulnerabilidad Congregacional que tantas veces sentimos como invierno.
Desde esta experiencia, iniciamos nuestro encuentro de Consejo de Congregación el día 14. «ENSANCHA El ESPACIO DE TU TIENDA y despliega las cortinas de tu morada, no te pongas límites. Alarga tus cuerdas y refuerza tus estacas. Porque te extenderás a derecha e izquierda.» (Is 54, 2-3)
Texto bíblico que nos invitó a compartir las llamadas para estirar nuestra tienda ensancharnos, desplegarnos, alargarnos y reforzar.
Dinámicas de conocimiento que favorecieron el diálogo, la escucha, el encuentro, dispusieron el corazón para concebirnos en unidad y comunión Congregacional en la diversidad.
A la vez de intercambiar risas, sentido del humor, que después de la pandemia han evidenciado la necesidad del encuentro, la riqueza y el don que somos cada una y que traemos en nombre de las personas y lugares donde gestamos la vida.
Fruto del diálogo hecho vida en cada Región hemos compartido los proyectos de vida y misión regionales: Europa, América del Sur y África. Caminos y procesos distintos unidos por la realidad de la casa común, tienda que nos ampara, cobija con la humanidad y la tienda congregacional que nos desafía a vivir la osadía de ser mujeres consagradas de nuestro tiempo, de camino con otros y otras, con mirada crítica, mística y profética.
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Unidos en oración por la profesión de nuestras hermanas. Ensancho el espacio de mi tienda. Depuro cosas que ya no uso ni necesito. Me desprendo de lo material.